Fue pensada en el difícil momento de la sanguinaria guerra que ha dejado detrás de si: muerte, sufrimiento, soledad y mil dificultades para tantos niños y adolescentes; ahora se ha convertido en señal de esperanza y de vida para ellos, que hoy buscan juntos la alegría de vivir y un proyecto para el futuro.
Actualmente son cuatro las casas familia: la primera fue inaugurada el 8 de diciembre de 2001, la segunda el 18 de mayo de 2003, mientras que la tercera y la cuarta han sido abiertas hace dos años para alojar a los chicos y las chicas que frecuentan las escuelas de Lunsar. Son 40 las chicas y chicos acogidos.
Murialdo Home está bajo el cuidado de la Comunidad Religiosa de los Padres Josefinos y de la Missionaries' Friends Association.
Dicha asociación, que nació en 1997, en medio de la guerra, con el objetivo de cuidar de los niños amputados, huérfanos y abandonados, surgió de la idea y de la buena voluntad de algunos jóvenes de la parroquia Holy Cross.
Es una realidad fuertemente en sintonía con la vida y las opciones de san Leonardo Murialdo y que da ulterior sentido a la presencia de la congregación en Sierra Leona.
EL CONTEXTO:
Sierra Leona es un país extremadamente pobre, se encuentra en el último puesto de la clasificación ONU para el desarrollo humano. Después de una guerra terrible, que se ha prolongado por diez años, el país sigue todavía padeciendo sus consecuencias catastróficas. Es un estado mal gobernado, que no logra restablecerse, también porque la corrupción campea en todo sitio.
El promedio de vida ronda alrededor de los 30 años, la mortalidad infantil es muy alta y el 85% de la gente es analfabeta. ¡El sueldo promedio, para quien tiene la suerte de tener un trabajo, está de cerca de un dólar al día!
Después de la guerra, en los suburbios de Freetown, la capital de Sierra Leona, ha surgido un barrio llamado Kissy Low Cost, "casas" a bajo coste, un barrio de casas populares, dónde se han agrupado las familias más pobres que no pueden alquilar una casa de una o dos habitaciones